Barrio de San GilCERVERA R.
A. UN SUEÑO
Una piedra en el camino
Me enseño que mi
destino
Era rodar y roda…
¡Hola Luisa! Deseo qué: Tus descansos eternos en tus
soplos vahaos serán sin convulsiones ni conflictos; te lo digo porque en
nuestro mundo no paramos, entre guerras partidistas y de religiones, brexit
(neologismo Britain-exit) con espera
de miles de camiones en el euro-túnel de la Mancha, para poder llevarles frutas
y hortalizas a Inglaterra, virus Covid-19 que nos ataca, vacunas anti virus
¡qué negocio! Y viejos acojonados en espera de vacuna milagrosa, no paramos en
darle al bolo, porque lo que es la vida cotidiana cada día estamos todos más anquilosados
en nuestros quehaceres cotidianos. Los negocios, sobre todo los que dan cara al
público, cada día van en declive, algunas familias están en mínimos de ingresos
para subsistir. El siglo XXI es de fuertes cambios para el ser humano, lo que
no sé si será para bien o para mal. A mí si el cuerpo me deja cumplir algún año
más, puede que me deje ver el principio de un fin con ganas de recuperación
para todos. El comentario que te hago es de futurólogo aficionado, no me tengas
mucho en cuenta, las cartas se me dan mal y, en el sociosanitario sentado en mí
habitáculo, todo se ve algo más oscuro. El mirar por la corredera del balcón y
ver cielo, nubes, casas y monte me da un respiro de buena voluntad.
Sigo recuperándome bien de la rotura del acetábulo-fémur
derecho ya llevo un mes y 20 días desde mi caída y las molestias son mínimas,
incluso puedo andar, despacito y con cuidado, pero lo hago con el taca-taca por
el pasillo del socio a ratos, a no ser
que el correr me haga perder lo ganado y volver a retroceder. Las visiones han
desaparecido, solo veo realidades hospitalarias. Gracias a las enfermeras que
son muy simpáticas y están al día del buen humor nos dan un respiro. La hora
que da el socio de visitas, tus hijos y nietos se turnan ya que sólo puede
entrar un familiar por día y hora. Todos, hijos y nietos me cuentan cosas de
cómo les va. El otro día tu hija me contaba cosas de ti, te admira, como todos te
admiramos y, me decía: no se explica cómo tu sin tomar notas de cocina ni siquiera medias ni pesabas los ingredientes
de tus comidas o pasteles, nos dabas
unas suculentas comidas, no de un gran chef sino de una gran cocinera
tradicional riojana e incluso catalana, tus canalones y paellas estos ya pasan
a ser historia para todos nosotros y las ¿croquetas? —insuperables—; compro
algunas veces en un delicatesen comida, se dejan comer, pero hay un abismo con
todos tus platillos variados. A pesar de comer bien aquí en el socio, tengo
ganas de llegar a casa y comerme un par de huevos con chorizo y poder rociarlo
con un rioja joven, ya sabes tú que el buen vino joven afrutado, siempre es el
que más me ha gustado, los vinos reservas, crianzas y añejos, muchas veces se
pasan con el gusto a barrica y para mi le quitan calidad al caldo de la uva.
Gustos, colores y vinos las personas las tenemos en todas las mentes libres,
esto hace que la vida sea tan bella.
La caída de la bicicleta no fue de las más espectaculares
que he tenido, pero si la más desafortunada, al pasar un paso cebra y subirme a
la cera, me caí en cera enlosada con mármol. Estas subidas en Salou están en
todas las aceras en algunas son anchas y en otras estrechas, esta era estrecha
y además con un resalte entre cera y calzada de unos 10 cm, aparte bajaba una señora
joven con un cochecito con bebe y esto hizo que me desequilibrara. Un joven me
atendió en la caída, era musulmán y también iba paseando con un cochecito con
niña, dejo todo para atenderme, ya no me pude levantar el me ayudo y me sentó
en un malecón de los que hay en la acera de esta calle, prestándome su móvil,
este día se me olvido el mío, esperando hasta que viniera la ambulancia y
familia. Desde aquí le doy gracias al anónimo samaritano. Shukraam.
Yo sé bien
Que estoy afuera
Pero el día que me
des-muera
Sé que tendrán que
llorar.
—Nuestro soplos vahos en nuestro astro stellarium sistema
sin ver ni oír ni hablar todo funciona a la perfección de sueño profundo y
solitario, aquí no hay dioses ni creencias enclaustradas en montes de piedra
arquitectónicos ni arabescas palabras confusas de mil pensamientos que valgan
para ver a un Dios, aquí el sistema es muy profesional socialista. Así te
cuento para que no te hagas falsas conclusiones en supuestas peticiones en
algún santo de tu preferencia pensando que vas a tener ventana de cara al
exterior, esto no sirve.
Vosotros todos os quejáis de guerras, virus, ocupas,
malhechores, hambres G, etc.… Aguanta lo que puedas y vive con lo que tengas
más a mano, hasta tu propio final y el final de cada uno, que tenéis que vivir
con la máxima bondad y alegría de vida de despedida de soltero, después el
reposo será silencioso en el nuevo astral stellarium sin ver ni oír ni hablar con dignidad de haber vivido una vida sin
rencor a la humanidad.
Te veo muy bien de tu rotura del acetábulo fémur derecho,
por lo menos el izquierdo conserva su compostura, que no es moco de pavo, ya
que la derecha y la izquierda necesitan apoyarse entre sí, siempre os quedan
las muletas que te pueden ayudar a poder andar otra vez y sino un carrito para
seguir con tu vida y así poder seguir viviendo.
Despídete de la bicicleta, ponla en un pedestal y como si
fuera el becerro de oro de Aron, ponla en un altar y adórala cada día y espera
que Moisés baje de la montaña sagrada para que te de permiso para volver a
montarla, quiero decir que tu máximo puede ser llegar a aspirar un triciclo
para darte un paseo e incluso poder hacer e ir a comprar y todo esto es mucho
decir. Cómo futurólogo te veo un poco en las nubes, aunque en este caso no vas
del todo desencaminado, el futuro no es muy agüero pero siempre algunos se salvan,
normalmente son los de siempre, procura engánchate a ellos. Más vale ser cabeza
de ratón que cola de león, ¡Ostias en vinagre! Tú a lo tuyo, no hagas caso de
los refranes y cuídate. En el
socio-sanitario Francolí, se esté bien, pero procura alejarte de él
Buenas fiestas a todos los cerveranos y que el año que
viene os sea más propicio en bienes y salud y no preocuparos mucho por el
covid-19. ESTO TAMBIÉN PASARÁ y la
nostalgia de barrio bajero que tienes, seguro la podrás apaciguar este verano,
sino te pones malo. VIVA SAN GIL.
El amante de media noche,
el que ansió que ella le
siguiera,
el que cuenta las
campanadas
como un enfermo
desahuciado;
el que pone cara de cárcel
cuando se mira en el
espejo:
es el furtivo que no
duerme
acechando a su
compañera,
y ella es feliz porque
ahora
vive una noche tan
inefable
y tan honda como la
muerte.
Poema: José Agustín Goytisolo
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